Meditación. Buenos días. Te esperaba para comenzar el día juntos. Quédate tranquilo,  no saltes  de la cama todavía.  Permanece en ella unos minutos más.  Disfruta de este momento de bienestar. ¿Has tenido una buena noche? ¡Qué bien! Estarás fresco y con energías. ¿Acaso te has sentido inquieto y el descanso no ha sido del todo reparador? A veces esto pasa cuando no logramos dejar atrás las experiencias del día y ellas se meten en la cama con nosotros.

Pero, un nuevo día empieza ahora, un día que será brillante y colmado de bendiciones para ti.  Así que, anímate y quédate conmigo. Prepárate para recibirlo y para vivirlo con alegría, con energía, con optimismo. Muchas cosas buenas descubrirás en este día, te lo aseguro.  No pienses en tu agenda todavía. Ya tendrás tiempo para eso. Ahora permanece en este presente,  acompañado de mi voz que ya está en tus oídos, en tu mente, en tu cuerpo.

Te esperan experiencias asombrosas, piensa en eso, piensa que vivirás un día excelente, en el que te sentirás muy bien. Deja atrás tu pasado, tus preocupaciones, tus problemas. Hoy no cargarás con esa mochila llena de negatividades.

Asimismo, en este nuevo día saldrás liviano, dispuesto a aceptar lo que el universo te brinda.  Sabes que tienes en ti todo el potencial, toda la fuerza. Sabes también que tomarás las mejores decisiones, porque las respuestas a tus inquietudes llegarán. La fuerza creadora te acompaña en todo momento, te cuida y te ayuda a cada paso. Así que, tranquilízate y respira profundo. Siente el amor en ti.

A tomar en cuenta

Tu respiración es amor, pues te da vida. Todo tu cuerpo es amor, porque funciona sin que tengas que esforzarte para eso. Tú eres amor, tenlo siempre presente en este día. Y repítelo: ‘Yo soy amor’, ‘Yo soy amor’, Que esta sea una afirmación siempre presente en tu mente.  Ese amor te libera del miedo, de la ansiedad, de la culpa, del resentimiento. Porque ese amor es más fuerte que todas esas emociones negativas. Déjalas salir, para que el amor se expanda.

Agradece a ese amor. ‘¡Gracias al amor que hay en mí! ¡Al aire que sostiene mi vida! ¡Al universo que abrió mis ojos hoy a este día maravilloso! ¡Gracias, gracias, gracias!’

Mira a tu alrededor. ¡Tienes tanto por lo que agradecer! ¿Estás cómodo en tu cama? Siente la suavidad de las sábanas que te proporcionan confort. ¡Qué bien estás! ¿Verdad? ‘¡Gracias cama, tú me brindas comodidad para el descanso!’  Respira ese amor.

El aire que entra en cada inspiración traslada el amor por todo tu cuerpo, impregna tu sangre y llega a cada célula. Exhala lentamente y saca de ti todo lo que duele, lo que te hace sentir mal, lo negativo.

además, solo se queda en ti el amor que te da un poder increíble, que te brinda todas las respuestas para tus decisiones. Lo tienes en ti y estará en ti durante todo el día, durante todos los días. Solo tienes que conectar con él.  Todo irá bien en este día.

Otros aspectos importantes, de la Meditación

Toma una ducha. Agradece la magia de abrir el grifo. Lo haces cada día automáticamente, pero hoy tomarás conciencia de cuánto poder tiene esa ducha que está ahí, a tu disposición, que es parte de ese amor que te envuelve. El agua tibia se llevará todas las tensiones de tu cuerpo. Siéntela en la nuca, mientras inclinas suavemente la cabeza hacia tus hombros. Relaja tus músculos ¿lo sientes? ¡El jabón es suave y huele tan bien!  Acaricia con la espuma todo tu cuerpo, mímate, tú lo mereces. ‘¡Gracias por este baño reconfortante!’

No te vistas con cualquier ropa. Elígela con  amor, ponte la que tengas ganas de usar, esa con la que te sientes cómodo y que crees que te va de maravilla. Valora los colores que lucirás, las telas cálidas o frescas de acuerdo a la estación y a la temperatura ambiental. ¡Qué grato es tocar tu ropa! Tú la has elegido por algo, o alguien que te aprecia te la ha regalado. Y en esa elección o en ese regalo hay mucho amor. Tu ropa está envuelta en amor.

Toma en cuenta

Si usas un uniforme, agradécelo. Es un símbolo de ese trabajo que te permite ganar dinero y satisfacer tus necesidades. ‘¡Gracias!’  Es un día nuevo, así que renuéva tu uniforme con algún detalle, un pañuelo de color en el bolsillo, un broche, tu cinturón preferido o dale un toque especial con un peinado diferente.  Y si te gusta el maquillaje, dedica tiempo a él. Mírate, ¿te agrada resaltar los rasgos de tu cara con algún toque? Pues hazlo, vale la pena porque lo estás haciendo por ti y para ti, porque te amas. Entonces,  cuando te mires al espejo, exprésate ese amor. ‘¡Me amo! ¡Amo mi cuerpo, mis ojos, mi cabello! ¡Me veo bien, me siento bien! ¡Soy perfecto! ¡Merezco todas las bondades que este día tiene reservadas para mí! ¡Gracias, gracias, gracias!’

¡Qué bien estás comenzando el día! Mereces esa atención que dedicaste a ti mismo, esos mimos, todos los cuidados. ¡Los mereces!

También el desayuno es importante, porque tu cuerpo y tu cerebro lo necesitan. Mira tus alimentos. ¿Has pensado en todo el proceso que han pasado para estar en tu mesa?  ‘¡Gracias a la tierra que permite que esos alimentos se produzcan! ¡Gracias a tantas personas que han trabajado en ellos para que pueda disfrutarlos! ¡Gracias, alimentos, gracias!’  Y gracias también a todos tus electrodomésticos que te permiten mantenerlos frescos y prepararlos a tu gusto. También ellos son obra de otras personas que han puesto su empeño para que existan para ti. ¡Cuánto amor hay en cada cosa que te rodea! Disfruta de esos alimentos, siéntelos en tu boca y mientras entran en tu cuerpo, agradece porque te darán la energía necesaria para el día. Bendícelos. ‘¡Gracias por cuidar de mí, alimentos!’

Finalmente

Tienes por delante un día increíble, ya lo estás viviendo. Todo en él está movido por el amor y tú también eres amor. Así que, nada irá mal, todo será perfecto. Tú creas tu propia realidad con tus pensamientos, así que, ten esto en cuenta.  No importa tu pasado, ni todos los pensamientos que te dominaban antes. Importa este nuevo día, importa que estás eligiendo estar bien, importa que te has liberado del miedo, de la ansiedad, de la culpa, del odio. Importa que has elegido la alegría y la felicidad, que te has elegido a ti, y que tú mereces todo lo bueno que vas viviendo.

¿Hay sol afuera? ¿Acaso llueve? Será maravilloso salir con sol o con lluvia. Ambos son necesarios para las plantas, para los animales, para el equilibrio del mundo, para ti.  ‘¡Gracias, sol! Con tu luz todo se vuelve verde y lleno de vida. ¡Gracias, lluvia! Nutres la tierra y haces que la vegetación prospere.’ ¡Qué maravillosa y perfecta es la naturaleza! Existe una inteligencia superior, un amor superior que hace que el mundo sea perfecto.   Piensa que así es, que el mundo es perfecto y que en este mundo perfecto, estás viviendo un día genial.  Nada podrá desalentarte, porque el amor te hace fuerte. Siéntelo, todo tu ser es amor, todo lo que te rodea es amor, procede del amor. Y el amor es felicidad.

Recuerda

Cuando estés camino a tu trabajo, agradece el medio que usas para transportarte. ¿Vas caminando? ¡Qué bueno! Disfrutas del aire en la cara, del movimiento de tus piernas que hace bien a tu organismo. Disfrutas de otras personas con las que te encuentras. ¡Salúdalas y deséales un buen día! Sonríe a quien está en la puerta de su negocio, al quiosquero, al recolector de la basura, al caminante. ‘¡Gracias, gracias por estar ahí, gracias por todo lo que hacen!’ Y si viajas en bus o en tu propio coche, disfruta del paseo con optimismo. Envía amor al lugar al que vas. Bendícelo, aún antes de llegar a él.

Repite conmigo: ‘Este es un nuevo día, un gran día.  Merezco todo lo bueno que estoy viviendo y viviré hoy.  Tomaré las mejores decisiones, porque la fuerza creadora es mi luz. Me amo y amo a los demás’

Disfruta de ti mismo y  del amor del mundo. ¡Estás viviendo un día bendecido!